Clasificación detallada de resistencias según su construcción: desde resistencias de carbón hasta SMD, y cómo elegir la adecuada para cada aplicación.
Clasificación de las resistencias según su construcción
Las resistencias son componentes electrónicos que presentan una oposición al paso de la corriente eléctrica. Esta oposición, denominada resistencia, se mide en ohmios (Ω). A lo largo del tiempo, se han desarrollado distintos tipos de resistencias que varían en función de su construcción, material y aplicaciones. A continuación, se presenta una clasificación detallada de las resistencias basada en su construcción.
1. Resistencias de carbón
Estas resistencias se fabrican mediante la mezcla de partículas de carbón y un aglutinante. La proporción de carbón determina la resistencia del componente. Por lo general:
- Resistencias de carbón aglomerado: Consta de una mezcla de polvo de carbón y un aglutinante. Tienen un rango limitado de valores y su coeficiente de temperatura no es muy estable.
- Resistencias de carbón prensado: Son más precisas que las aglomeradas y se fabrican mediante la prensión de polvo de carbón bajo alta presión.
2. Resistencias de película metálica
Estas resistencias están fabricadas por deposición de una fina capa de metal sobre un sustrato cerámico. Son más estables y precisas que las de carbón. Dentro de esta categoría encontramos:
- Resistencias de película fina: Utilizan capas muy delgadas de metal, ofreciendo una buena precisión y estabilidad. Son adecuadas para aplicaciones de precisión.
- Resistencias de película gruesa: Utilizan capas más gruesas de metal y son menos precisas que las de película fina. Sin embargo, son más económicas y se usan en aplicaciones menos críticas.
3. Resistencias de alambre o bobinadas
Se fabrican enrollando un alambre, generalmente de níquel-cromo, alrededor de un núcleo cerámico. Son especialmente útiles cuando se requieren valores de resistencia muy altos o cuando deben soportar altas potencias. Pueden ser:
- Bobinadas de precisión: Tienen un alambre muy delgado y ofrecen una precisión muy alta. Son ideales para aplicaciones donde se requiere exactitud.
- Bobinadas de potencia: Son capaces de disipar grandes cantidades de energía sin dañarse. Se utilizan en aplicaciones donde se requiere manejar altos niveles de corriente.
Estas son solo algunas de las categorías principales según la construcción de las resistencias. Cada tipo tiene sus ventajas y desventajas, y su elección dependerá de la aplicación específica y las necesidades del circuito.
4. Resistencias de óxido metálico
Estas resistencias están fabricadas a partir de óxidos metálicos, siendo el óxido de estaño el más comúnmente utilizado. Tienen una gran capacidad para soportar sobretensiones y son muy estables frente a variaciones de temperatura. Por lo general, se usan en aplicaciones que requieren alta estabilidad y fiabilidad.
5. Resistencias variables
Como su nombre indica, el valor resistivo de estas resistencias puede ser ajustado. Los potenciómetros y reóstatos son ejemplos comunes de resistencias variables. Son útiles en aplicaciones donde es necesario ajustar la resistencia para obtener un valor específico o modificar un parámetro del circuito en tiempo real.
- Potenciómetros: Tienen tres terminales y se utilizan generalmente para controlar el volumen en dispositivos de audio o para ajustar niveles en diversos circuitos.
- Reóstatos: Funcionan con dos terminales y se utilizan para controlar la corriente en un circuito, como en reguladores de intensidad luminosa.
6. Resistencias SMD (Surface Mount Device)
Estas resistencias están diseñadas para ser montadas directamente en la superficie de las placas de circuito impreso. Debido a su pequeño tamaño, son ideales para dispositivos electrónicos modernos que requieren miniaturización. Ofrecen características similares a sus contrapartes de montaje tradicional, pero su manejo requiere herramientas y técnicas especializadas debido a su tamaño reducido.
Conclusión
Las resistencias son componentes fundamentales en la electrónica. Dependiendo de su construcción, cada tipo ofrece características distintas que las hacen adecuadas para diversas aplicaciones. Desde las resistencias de carbón, que son una de las más antiguas y simples, hasta las SMD, que responden a las necesidades actuales de miniaturización, la elección adecuada garantizará el correcto funcionamiento y eficiencia del circuito. Es esencial conocer las diferencias entre estos tipos para seleccionar la resistencia más adecuada según el diseño y propósito del circuito en cuestión.